Bitcoin terminó abril con una ganancia del 14%. Desde principios de mayo, el token ha estado cotizando en verde, con un alza de más del 10%.
El evento destacado para el token principal este mes fue su ruptura por encima de los $100k, recuperando finalmente el hito anterior.
El avance ocurrió el 8 de mayo, cuando Bitcoin se disparó un 6.3% en una sola sesión de negociación, probablemente impulsado por la decisión de la Fed de mantener estable su tasa de interés clave.
Un patrón similar se desarrolló en marzo de 2025, cuando los funcionarios mantuvieron la tasa de fondos de la Fed en el rango objetivo de 4.25-4.50%.
Esa decisión desencadenó un movimiento positivo pero de corta duración en el mercado.
Los analistas señalan un aumento en los flujos de capital hacia los ETFs de criptomonedas.
La tregua comercial de 90 días entre EE.UU. y China también puede haber alimentado el creciente interés.
Según CoinGlass, el pico de entrada neta se produjo a finales de abril.
El Índice de Miedo y Codicia actualmente se sitúa en 73.
Desde una perspectiva técnica, vale la pena revisar el análisis clásico de ondas.
Como se señaló en una de nuestras visiones generales hace un mes, podrían estar en juego dos escenarios.
En el caso alcista, la acción del precio sigue subiendo y eventualmente forma la quinta onda de impulso.
El objetivo para este rally podría alcanzar los $121,500, con margen para subir aún más.
Este escenario ganaría tracción si Bitcoin establece nuevos máximos históricos por encima de $109-110k, lo que hasta ahora no se ha materializado.
Dicho esto, las probabilidades de que esto ocurra parecen bastante fuertes.
El escenario bajista, por otro lado, ve el precio cayendo por debajo de $65-70k.
Esto tampoco se ha concretado, pero sigue siendo una posibilidad.
Notablemente, nuestro recuento de la finalización de la cuarta onda podría ser erróneo, lo que significa que el precio aún podría caer a $75k, aunque tal giro de los acontecimientos parece improbable en este momento.
Otro punto clave es la naturaleza de la formación de ondas de impulso.
Según la teoría clásica de Ondas de Elliott, la estructura interna también sigue un patrón de cinco ondas.
Esto sugiere que incluso si se produce una corrección, sería prematuro predecir el fin del impulso de la onda.
En general, reiteramos nuestra perspectiva cautelosamente optimista para la trayectoria del precio de Bitcoin en el futuro.